La aerotermia es una tecnología que aprovecha la energía térmica del aire exterior para transferirla a un sistema de calefacción o refrigeración en un edificio o vivienda. Específicamente, extrae calor del aire exterior y lo amplifica para proporcionar calefacción (en invierno), o bien, extrae calor del interior y lo expulsa al exterior para refrigerar (en verano). Se utiliza una bomba de calor para llevar a cabo este intercambio de energía.
La ventaja principal de la aerotermia es que utiliza una fuente de energía renovable (el aire exterior) y es muy eficiente en su operación, ya que por cada unidad de energía eléctrica que consume, puede proporcionar varias unidades de energía térmica.
En edificios con demandas energéticas elevadas, especialmente en instalaciones centralizadas que sirven a múltiples viviendas o espacios, la aerotermia por sí sola puede no ser suficiente para cubrir toda la demanda, especialmente durante picos de consumo o en condiciones climáticas extremas. Aquí es donde entra en juego la hibridación.
La hibridación implica combinar la aerotermia con otro sistema de calefacción o refrigeración para garantizar que se satisfagan las necesidades energéticas del edificio en todo momento. Un sistema común con el que se hibrida la aerotermia es una caldera de gas tradicional o de condensación.
La aerotermia ofrece múltiples beneficios desde el punto de vista de la eficiencia energética, la economía y la sostenibilidad. A continuación, te presento los principales beneficios de esta tecnología:
La instalación de un sistema de aerotermia, requiere una planificación y evaluación adecuada para asegurar su eficiencia y eficacia.
La aerotermia es más que un sistema de climatización; es una visión hacia un futuro más verde y sostenible. Da el paso hacia una solución que beneficia tanto a tu bolsillo como al planeta.
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